La energía que se necesita depende de dos fuentes: un 25% del suministro eléctrico y el 75% restante del aire exterior con lo que solo pagas el 25% de lo que consumes en rendimiento estacional. No producen emisiones de gases contaminantes a la atmósfera y el mantenimiento que necesitan para tener un nivel óptimo de funcionamiento es mínimo: ecología, eficiencia y ahorro.
España es un país donde el rendimiento estacional medio de la bomba de calor es muy alto: 400%, mientras que el de una caldera de gasoil es de un 85%, el de una caldera de gas convencional de un 89% y el de una caldera de condensación de un 107%.
Consigue un ahorro de más del 50% en sus facturas de combustible.
Es ideal para utilizar junto a suelo radiante, ya que se aprovecha toda la superficie de las habitaciones y no hay equipos a la vista, lo que mejora notablemente la estética de la estancia, además no genera corrientes de aire, ruido ni suciedad en paredes y/o conductos.
Y si tienes una instalación convencional en tu vivienda, con radiadores, fancoils o suelo radiante puedes aprovecharlos sin problema.
Los modelos de fancoils murales, de suelo, cassette o conductos son los más interesantes para las viviendas ya construidas, ya que permiten la utilización de la aerotermia en caso de no disponer de suelo radiante.
Es la solución ideal para viviendas, chalés adosados, apartamentos, etc… ¡su combinación con un sistema fotovoltaico ofrece costes sumamente reducidos y próximos a CERO!
Controla todo desde el móvil, cuánta energía produces y consumes en cada instante.
Compra con financiación o al contado, puedes abonar el precio íntegro de la instalación o solicitar una financiación de entre 2 y 10 años, ya que somos prescriptores de las principales entidades bancarias.
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